¿Has sentido alguna vez esta sensación? Esa en la que ya no encuentras motivación ninguna para sonreír. Esa en la que ya no sabe ni que música escuchar, que hacer, con quién hablar. Te sientes insignificante y piensas: Si no yo no sé quién soy... ¿Quién va a saberlo? Sientes que nadie te comprende, que ya todo da igual. Intentas ser igual que antes, pero no lo logras.
Lo único que quieres es escapar. Escapar de tu cuerpo y no volver jamás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario